DE MICHAELANGELO BARNEZ
Hola, creo que ya conoces mi nombre: Soy el Diablo. Y he estado por aquí desde que apareció tu conciencia. Sí, justamente cuando apareció Dios. Y déjame decirte que soy tan poderoso como él. Bueno, a decir verdad, porque no me gusta mentir por las puras albóndigas, él es un poquito más poderoso que yo, sino, no hubiera podido echarme del cielo cuando me sublevé. Pero no tanto eh, porque él, así tan grande como se cree, no puede entrar a mi cielo: El Infierno. Entonces, así convivimos ambos dentro de ti.
Pero no quiero hablar de él, resulta muy aburrido ¿Acaso no has leído la biblia o la historia sagrada? Uff resulta aburridísima porque él siempre gana, pero en mi descargo te pregunto: ¿No sabías que la historia la escriben los que ganan? Bueno pues, que esperabas.
De lo que quiero hablar es acerca de lo tan poderoso que soy yo ¿No me crees? Te lo demostraré:
¿Recuerdas que Moisés encontró a parte del Pueblo Elegido adorando ídolos, justamente al bajar del monte Sinaí con las Tablas? ¿Sí? ¿Sabes lo que pasó? Dios mandó matarlos, y Moisés muy obediente degolló a más de 3,000 descarriados. En cambio yo, veinte siglos después, maté a seis millones de ellos en los campos de concentraciones y cámaras de gas. Además de los 60 millones que maté en esa guerra ¿Ves?
¿Recuerdas la destrucción de las ciudades del pecado, Sodoma y Gomorra, por Dios? Eso no es nada comparado con la destrucción que hice 2,000 años más tarde en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, en donde maté a más de 300,000 inocentes de la población civil en un instante. ¿Ves?
Ya, ya, ya. Me vas a decir que el poder no sólo se mide en muerte y destrucción, sino en el amor… Ja, ja, ja… iluso… Entonces, te pregunto: ¿Cuánta gente pobre e inocente muere en todos los desastres naturales como los terremotos, tsunamis, tifones, huracanes, tornados, u otros como los accidentes, etc.? Pero aun así eso no es nada comparado a mi poder, porque al final yo destruiré lo mejor de su creación: Al Género Humano. Sí, a los 7,000 millones que viven en este planeta con la polución, el calentamiento global o las armas nucleares.
Sí, sí, sí… nuevamente estoy hablando de muerte y destrucción ¿Pero, existe otra cosa en el mundo más importante que la vida? No, no hay nada. Sin embargo soy tan poderoso que siembro la avaricia ilimitada del poder y la riqueza en algunos hombres, que como consecuencia traerán la destrucción de su propia habita, y así la de todos.
No me crees ¿No? Entonces dime, que hace o ha hecho Dios que yo no pueda destruir.
¿Qué, me vas a contar la historia de la creación en 7 días? No jodas pues.
Entonces un arcángel se apareció y le respondió al Diablo: “Te creó a ti, como opción del mal, para que el hombre en su conciencia tenga en sus manos la libertad de escoger su destino”
Y el Diablo, cuernoscaídos y con el rabo entre las piernas, se marchó cabizbajo… ¿Rendido? No, sino a seguir promoviendo el desmadre entre los hombres, con mucha fe en que el apocalipsis llegará algún día.
Hola, creo que ya conoces mi nombre: Soy el Diablo. Y he estado por aquí desde que apareció tu conciencia. Sí, justamente cuando apareció Dios. Y déjame decirte que soy tan poderoso como él. Bueno, a decir verdad, porque no me gusta mentir por las puras albóndigas, él es un poquito más poderoso que yo, sino, no hubiera podido echarme del cielo cuando me sublevé. Pero no tanto eh, porque él, así tan grande como se cree, no puede entrar a mi cielo: El Infierno. Entonces, así convivimos ambos dentro de ti.
Pero no quiero hablar de él, resulta muy aburrido ¿Acaso no has leído la biblia o la historia sagrada? Uff resulta aburridísima porque él siempre gana, pero en mi descargo te pregunto: ¿No sabías que la historia la escriben los que ganan? Bueno pues, que esperabas.
De lo que quiero hablar es acerca de lo tan poderoso que soy yo ¿No me crees? Te lo demostraré:
¿Recuerdas que Moisés encontró a parte del Pueblo Elegido adorando ídolos, justamente al bajar del monte Sinaí con las Tablas? ¿Sí? ¿Sabes lo que pasó? Dios mandó matarlos, y Moisés muy obediente degolló a más de 3,000 descarriados. En cambio yo, veinte siglos después, maté a seis millones de ellos en los campos de concentraciones y cámaras de gas. Además de los 60 millones que maté en esa guerra ¿Ves?
¿Recuerdas la destrucción de las ciudades del pecado, Sodoma y Gomorra, por Dios? Eso no es nada comparado con la destrucción que hice 2,000 años más tarde en las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, en donde maté a más de 300,000 inocentes de la población civil en un instante. ¿Ves?
Ya, ya, ya. Me vas a decir que el poder no sólo se mide en muerte y destrucción, sino en el amor… Ja, ja, ja… iluso… Entonces, te pregunto: ¿Cuánta gente pobre e inocente muere en todos los desastres naturales como los terremotos, tsunamis, tifones, huracanes, tornados, u otros como los accidentes, etc.? Pero aun así eso no es nada comparado a mi poder, porque al final yo destruiré lo mejor de su creación: Al Género Humano. Sí, a los 7,000 millones que viven en este planeta con la polución, el calentamiento global o las armas nucleares.
Sí, sí, sí… nuevamente estoy hablando de muerte y destrucción ¿Pero, existe otra cosa en el mundo más importante que la vida? No, no hay nada. Sin embargo soy tan poderoso que siembro la avaricia ilimitada del poder y la riqueza en algunos hombres, que como consecuencia traerán la destrucción de su propia habita, y así la de todos.
No me crees ¿No? Entonces dime, que hace o ha hecho Dios que yo no pueda destruir.
¿Qué, me vas a contar la historia de la creación en 7 días? No jodas pues.
Entonces un arcángel se apareció y le respondió al Diablo: “Te creó a ti, como opción del mal, para que el hombre en su conciencia tenga en sus manos la libertad de escoger su destino”
Y el Diablo, cuernoscaídos y con el rabo entre las piernas, se marchó cabizbajo… ¿Rendido? No, sino a seguir promoviendo el desmadre entre los hombres, con mucha fe en que el apocalipsis llegará algún día.